viernes, 19 de agosto de 2011

SUPER 8


(aún conservo las pelis de súper 8 que filmaban en mi casa)
Para los niños que en este 2011 tienen entre 10 y 13 años las palabras Súper 8 no significan nada. ¿Una fórmula matemática? ¿Una clave secreta? Estos niños, nacidos entre 1997 y 2001 han vivido en una época en la que la imagen está al alcance de la mano. Si quieren hacer una película, un video mejor dicho, lo filman con el móvil y a los 10 minutos lo está viendo todo el mundo. Para ellos, el hecho de esperar a que te devuelvan el carrete de fotos o la película de súper 8, sin saber si lo que has filmado o fotografiado corresponde a lo que querías, es algo asi como contarles que los hombres prehistóricos pintaban en las cavernas. Esto no será un impedimento para que estos niños disfruten con Súper 8, la película que han hecho a cuatro manos Steven Spielberg y J.J. Abrams. Porque ya sea con el móvil, la cámara digital o simplemente dibujando en un papel, lo que si que no ha cambiado –desde la prehistoria- es la necesidad de contar historias fantásticas. Por eso este film que tiene aroma de Cuenta conmigo, Exploradores, o E. T. es al mismo tiempo una película de ahora mismo. En 1979, año en que pasa la acción, los niños que tenían 13 años –Abrams por ejemplo- soñaban con lo que un niño grande de 32 años –Spielberg, por ejemplo- imaginaba para ellos. De esos dos sueños o imaginaciones nace esta historia que bebe en el pasado, en ese ambiente de camaradería de pueblo, de amistades para toda la vida, de cine de género, pero que sabe que para enganchar al público de este siglo XXI tiene que ofrecer espectáculo, miedo, un misterio y un ser del espacio que tiene mas de King Kong que de Alien. Todo junto un placer para gente de todas las edades con capacidad de sentir que las mejores historias son las que uno inventa.
(Ayer se me olvidó recomendar que nadie se mueva del asiento antes de los créditos. Vienen con sorpresa y es estupenda)

1 comentario: