Here, Robert Zemeckis
Cuando vives
en una ciudad, se te olvida que debajo de las aceras hay tierra, campo. Se te olvida o nunca te lo
has planteado, que antes de que hubiera una casa, una tienda, un colegio, allí
había campo, árboles, flores, animales. Y otra gente. Muchas familias viven en
casas donde antes han vivido otras personas. Hay una memoria acumulada en los
muros y en la tierra que hay debajo. Nosotros, por ejemplo, vivimos en una
casita en la ladera de una montaña. Cuando yo empecé a vivir aquí, la casa era
nueva, no tenia historia acumulada, aun había calles de tierra y torrentes y
muchos árboles que poco a poco han desaparecido. Pero antes de mi casa, ¿Había
alguien viviendo en estos parajes?
Esta es la
idea central de Here, Aquí, la nueva
película de Robert Zemeckis, un film hasta cierto punto experimental y quizás
fallido, pero absolutamente fascinante y evocador. Here está basado en un libro dibujado (no es exactamente un comic),
de Richard McGuire. Un libro precioso que sin moverse nunca de una misma
habitación, va contando con viajes al pasado y al futuro, la vida antes de que
hubiera casa, ni siquiera humanos. El
autor del libro da la clave para entender este film, para disfrutar esta
propuesta vital: “Al principio quería poner como protagonista a un personaje
con el que el lector pudiese identificarse, con el que pudiese tener alguna
conexión emocional. Pero comprendí que no necesitaba un protagonista de carne y
hueso, porque todos compartimos una
serie de experiencias y recuerdos bastante parecidos de la vida familiar que nos permiten entrar en esta historia. Por eso el auténtico protagonista es el tiempo, que es una cosa que nos interesa muchísimo a todos.” Cuando
Zemeckis se enfrentó al reto de adaptar a la pantalla la historia de esa
habitación, de alguna manera traicionó al autor al tener un protagonista, una
especie de hilo conductor. No para toda la evolución, pero si para los últimos
sesenta años de vida de la casa. La gran dificultad era la de conseguir que el
tiempo fuera el eje central de lo que pasaba en ese lugar desde el tiempo de
los dinosaurios, pasando por los indígenas que vivían allí antes de la llegada
de los ingleses, como parte del paisaje de una gran casa colonial del siglo
XVIII, y desde que se empezó a construir en 1900. 1932 es un año importante en
la casa, pero es 1946 el año que marca el inicio de la historia de Richard y la
casa, el año de su nacimiento. Sin movernos nunca del encuadre tipo viñeta, los
cambios en muebles, vestuario, música, clima, fiestas que se van sucediendo en
ese salón de grandes ventanales, van contando tanto la historia del mundo a lo
largo del siglo XX y parte del XXI, como la historia del cine: Jurassic Park, El nuevo
mundo, ¡Qué bello es vivir!, las sitcoms
familiares de los sesenta. Tom Hanks encarna a Richard desde su adolescencia
hasta su vejez. Quizás sea este el principal error y dificultad de la película,
al tener un protagonista que envejece, mejor dicho cuatro, sus padres, él y su
mujer, el film tiene que jugar con maquillajes que no siempre están tan
conseguidos como el decorado o el vestuario. Pero a mí no me importa, entro en
la convención de ver a los actores como piezas del dibujo, como trazos de la
historia y me dejo llevar por ellos. Y al salir, miro la calle y las casas con
otros ojos ¿Qué había allí antes?
Emilia Pérez, Jacques Audiard
En cierto
modo también en esta película nos podemos preguntar ¿qué había antes? O mejor
dicho ¿quién era antes Emilia Pérez? Es una pregunta que se hacen muchas
personas en la película ante la aparición fulgurante de esa mujer salida de la
nada, riquísima filántropa mexicana, autoritaria y de una presencia imponente.
¿Quién era Emilia Pérez? El film de Jacques Audiard lo cuenta bajo la forma de
un narco/musical fascinante. Emilia antes era Manitas, un jefe narco temido y
peligroso, casado y con dos hijos. Un día, Rita, una abogada americana de
origen mexicano, recibe un extraño encargo: Manitas quiere ser una mujer. Así
nace Emilia Pérez. Así nace uno de los mejores films del año, así nace una
estrella que reivindica las mujeres trans. Porque Emilia es Manitas y ambos son
Karla Sofía Gascón. Pero aun siendo Emilia/Karla la auténtica protagonista, no
es la única que brilla en este musical perfecto y sorprendente. Zoe Saldaña es
la abogada que la acompaña en su camino, Selena Gómez es la esposa que no
entiende lo que pasa. Y junto a ellas, bailarines, músicos, cantantes,
coreografías imposibles, canciones inolvidables. Audiard ha hecho una opera en
cine. Un corrido hecho película, un film deslumbrante. Un espectáculo total.
(si quieren
escuchar la poderosa voz de Karla Sofía Gascón y compartir la sensatez de sus
ideas, la pueden ver y oír en esta entrevista https://filmtopia.net/es/entrevista-karla-sofia-gascon/)
Memoria colectiva del Cine Español: Un archivo vivo para
preservar testimonios de nuestra cinematografía. academiadecine.com/memoria
También esta plataforma habla de un antes y un ahora. Un antes que es memoria colectiva, el nombre de la web, un ahora, que es historia presente, y un mañana, porque estas entrevistas son semillas de futuro aunque hablen del pasado. La Academia de Cine Español ha puesto en marcha un programa de entrevistas largas, tranquilas, reflexivas, con profesionales del cine que tienen cosas que contar. “un archivo vivo, audiovisual y accesible a todos los públicos con testimonios de algunas de las personalidades de los diferentes oficios de nuestro cine”. Es una manera de construir historia, no de hacer historia. Ellos ya han hecho historia con sus trabajos, pero ahora, con esta memoria compartida, contribuyen a construir la historia. Son entrevistas indispensables para los estudiosos, interesantes para el público en general, necesarias para cualquiera que sienta curiosidad por saber más de personas que forman parte de su paisaje emocional desde hace mucho tiempo.
Hay
entrevistas con actrices y actores: Marisa Paredes, Julieta Serrano, Gemma
Cuervo, José Sacristán. Antonio Resines, Álvaro de Luna, Esperanza Roy, Juan
Diego, Fernando Chinarro, Manolo Zarzo. Con directores: Cecilia Bartolomé,
Adolfo Aristarain, Antonio del Real, Antonio Giménez Rico, Fernando Méndez
Leite, Fernando Trueba, Javier Aguirre, Jaime de Armiñan, Manolo Gutiérrez
Aragón, Pedro Olea. Directores de fotografía: José Luis Alcaine, Fernando
Arribas, Manolo Velasco, Porfirio Enríquez. Técnicos de distintas disciplinas: Pedro
Moreno, Sol Carnicero, Antón García Abril, Gumersindo
Andrés, Pablo Núñez, Reyes Abades, Romana González, Yvonne Blake. Es
un trozo de Historia del Cine, un trozo de vida. Un retrato de la sociedad
española. Un viaje hacia atrás para saber que hay debajo del cine que vemos,
para saber qué había antes.
El regalo de
esta semana es un cuadro pintado por Ramon cuando tenía 15 años y el
jardín de nuestra casa aun tenía memoria de lo que había antes (el pozo).