sábado, 30 de enero de 2010

DIAS AFRICANOS, NOCHES MADRILEÑAS


Esta semana se han estrenado tres películas interesantes. La mejor sin duda es EN TIERRA HOSTIL, de Kathryn Bigelow, de la que hablé en una entrada anterior.
Las otras dos son INVICTUS de Clint Eastwood y LA MUJER SIN PIANO, de Javier Rebollo.
Por orden de edad, comenzaremos por Invictus. Clint Eastwood, junto con Manuel de Oliveira, son los dos directores en activo con mas años a sus espaldas. El americano en realidad es un adolescente al lado del portugués, pero de todos modos, 80 años son 80 años. Eastwood sigue dando pruebas de su energía, de su capacidad de controlar una historia, de su fuerza como narrador. Pero le pierde la urgencia de rodar, como al portugués. Cada vez tienen menos tiempo y deben cumplir sus deseos y promesas. Como la de esta película, una promesa que le hizo Eastwood a Morgan Freeman cuando rodaban Million Dólar Baby. Y el viejo vaquero siempre cumple. Aunque no se crea la historia, aunque no la sienta, aunque sea algo ajeno a su manera de entender el cine (y la vida). Eastwood se pierde en la blandura y la bondad. Allí donde Spielberg habría hecho una película llena de emociones, Eastwood solo consigue un telefilme de altísima calidad y buena factura. Una lástima, pero no hay que lamentarse. Creo que ya está rodando un nuevo film, esta vez para cumplir otras promesa (a si mismo quizás): la de darle un personaje realmente bueno a Matt Damon, completamente perdido en este bienintencionado y un tanto repetitivo film.

LA MUJER SIN PIANO, de Javier Rebollo
Lo primero declarar. ME GUSTA MUCHO ESTA PELICULA.
Me gusta su sentido del humor subterráneo y sutil; su atmósfera de sueño/pesadilla; ese Madrid vacío donde resuenan los tacones de Carmen Machi. Me gusta ese extraño marciano que se cruza en su camino como una especie de ángel protector; me gusta la peluca negra de Rosa y la máscara de Búster Keaton que se le pone cuando se pierde en los bares: me gusta que recuerde tanto a Chantal Akerman, (Jean Dielman, 23 Quai du Commerce, 1080 Bruxelles) como a Aki Kaurismaki. Mas que seguir hablando yo de la película me parece mejor destacar algunas de las ideas que Rebollo tiene muy claras

-No hay géneros menores.
-Un corto es tan importante como un largo
-Es muy importante tener claro un estilo
-El fuera de campo o el borde del campo son tan importantes como lo que se ve
-El cine no debe reproducir la realidad, debe interpretarla
-Hay directores que muestran el mundo que les ha tocado vivir

-Y otros que muestran su propio mundo
-No hay finales en el cine moderno: los finales felices son falsos, los tristes no son comerciales.

-Hay finales ambiguos
-El uso del sonido es fundamental
-Hay que dejar espacio al azar y rodar rápido. No repetir
-Mejor tener personajes grises con historias dentro
-Hay que saber observar. Observar no es lo mismo que mirar
-Pensar en la película y confiar en la inteligencia del espectador


Inteligencia para disfrutar con este minimalisimo viaje al fondo de la noche de una mujer sin piano, pero con pitidos.

1 comentario:

  1. Me pareció un film muy interesante, genial.

    Y, aunque me gusta en su totalidad, no sé porqué me ha quedado grabado en la retina el plano de la entrada al edificio donde vive cuando recoje el correo.

    Por mi parte, incluso he hecho mi propia versión en un corto de un minuto. Aquí os lo dejo y... no olvideis la cantidad de cigarros que se fuma la protagonista en una noche... ¿Qué hubiera ocurrido si...?

    http://www.notodofilmfest.com/ediciones/09/?lg=es&corto=20840

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