(una rubia de Ramón que le habría encantado a Hitchcock)
Esta semana hay muy pocos estrenos. MAPA de León Siminiani
es uno de los más exóticos. No he visto este film, pero conozco sus trabajos
anteriores y si se parece a los cortos, seguro que es interesante, distinto, hermoso y un poco enervante. Una excelente combinación.
La que si he visto es Hitchcock.
Y tengo que confesar que… me ha divertido mucho. Normalmente las películas
sobre rodaje de películas suelen ser poco estimulantes. No siempre,
claro, (el Cazador blanco, corazón negro
de Eastwood es una prueba) pero parece que atreverse con personajes reales del
propio medio provoque una cobardía a la hora de hablar de ellos. No es el caso
de este film que se centra en un año crucial en la vida del gordo Mago del Suspense
(¿algún día dejaremos de llamarle así?): el año 1959. Hitch acaba de rodar Con la muerte en los talones y, como
siempre que acaba una película, se siente vacío, perdido. Vértigo ha sido un fracaso comercial y de crítica y los productores
no quieren arriesgarse con él. Pero él si quiere arriesgarse, es mas, necesita
arriesgarse. Y ese impulso creativo que
le empujaba hacia un abismo desconocido, es el que retrata este film irónico y
feliz a partir del momento en que decide adaptar una novela de Robert Bloch que
acabará siendo Psicosis. Pero 1959
fue un año importante para AH por otra cosa. Fue el año en que estuvo a punto
de perder a Alma Reville, su mujer desde 1924, colaboradora, amiga y sobre todo
apoyo en sus inseguridades. Alma es en el film Helen Mirren, una actriz capaz
de hacer creíble cualquier personaje. Hitch es Anthony Hopkins y si al principio
provoca un cierto rechazo por su caricatura del personaje, acaba por transmitir
los sentimientos de duda y los miedos de este director único e irrepetible.
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