Sin respirar no se puede
vivir. Pero se puede vivir respirando de distintas maneras. Las dos películas
de esta semana lo demuestran.
La abadesa, Antonio Chavarrías
Lo primero que se me ocurre
viendo esta interesante película es como se pude plasmar en imágenes la idea
del materialismo religioso,
entendiendo materialismo en el sentido marxista del término, no en el de
consumismo o explotación. A priori parece una contradicción, pero lo que hace
la joven abadesa en ese oscuro y frío convento es exactamente eso: materialismo
religioso. No hay nada de espiritual en su búsqueda, no hay nada metafísico,
Emma no es Santa Teresa. Emma tiene 17 años cuando llega a un perdido
monasterio en las montañas, en la frontera de los reinos cristianos y árabes.
Su misión es repoblar las tierras con nuevos cristianos. Estamos en el siglo
IX, en los Pirineos: el rey franco protege ese monasterio de las intrigas
políticas, los moriscos conviven con los cristianos que poco a poco van
extendiendo su influencia. El poder es el tema principal del conflicto entre
Emma y su hermano el Conde, entre Emma y las jerarquías eclesiásticas, entre
Emma y los campesinos, entre Emma y la hermana Eloísa. Poder no de la Iglesia y
la Nobleza, poder de una mujer con las ideas muy claras, dogmática y segura.
Chavarrías se inspira en la historia real de una abadesa olvidada por la
historia y ambienta su aventura solitaria en el magnífico castillo de Loarre en
pleno invierno, usando la iluminación de las velas que crean imágenes en clarososcuro
de una gran belleza, pero también de una gran opresión. Otras dos ideas me
surgieron viendo La abadesa. Una es
la contemporaneidad de los temas que se tratan: la discriminación de la mujer
en los estamentos de poder o los conflictos territoriales, sirven de espejo de
nuestro propio mundo. La otra es el paralelismo con Narciso Negro, de Michael Powell y Emeric Pressburger. En cierto
modo, La abadesa es casi un remake de
personajes, no de argumento, de Narciso
Negro. Una joven abadesa llega a un convento perdido en la montaña, alejado
del mundo. Quiere cambiar las cosas y llegar a proteger a los desheredados de
su territorio. Un hombre la ayuda en esa
función y entre ellos nace algo más que respeto, un amor reprimido. Hay una
joven nativa a la que la abadesa decide proteger. En el convento se enfrenta a
una monja que no oculta sus deseos y la
coloca ante un espejo. Las dos películas son quizás un poco largas, las dos son
de una belleza sublime. En lo que no son iguales es que La abadesa es muy terrenal a pesar de poner su fe por encima de
todo y Narciso Negro es mucho más
espiritual a pesar de su falta de fe. La
abadesa merece ser vista con ojos de hoy y apreciar todo lo que encierra en
las oscuras estancias de ese castillo en la nieve. Y si pueden vean Narciso Negro, está en Filmin.
Arnasa betean. A pulmón, Bertha Gaztelumendi y Rosa Zufía
En la entrada del Festival de San Sebastián del año pasado ya hablé de este interesante documental dedicado a reivindicar y celebrar las directoras vascas que han hecho y hacen cine en Euskadi y fuera de Euskadi. En realidad A pulmón habla de las mujeres cineastas más allá de su localización en el límite geográfico del país vasco. Habla del cine, de la búsqueda de un espacio narrativo, de la necesidad de colaborar, de la evolución de los temas, de cómo las pioneras de los años 80 abrieron camino a las mas nuevas directoras. Todo ello contado como la búsqueda de un tesoro en el fondo del mar que tres buceadoras a pulmón buscan en las aguas profundas. Bucear a pulmón es una gran metáfora de lo que han hecho muchas directoras en la historia: sumergirse en un espacio hermoso pero hostil, que te expulsa pero al que quieres pertenecer, un mar de fondo donde arraigar tus historias. En el mar nació la vida y en el mar nacen las muchas sirenas que surcan el cine con sus aventuras. A pulmón es un documental de memoria y de descubrimiento, pero también una invitación a ver y buscar las películas que han hecho estas mujeres. Esas y muchas más, claro.
El regalo de esta semana es un
bodegón que alegraría la vida de la abadesa de Chavarrías.
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